Cómo transportar tu moto de forma segura
A veces surge la necesidad de transportar una moto por una avería, una mudanza, un traslado a otra isla o simplemente porque no puedes circular con ella en ese momento. Sea cual sea el motivo, es importante hacerlo con seguridad para evitar daños o sanciones.
Existen varias formas de hacerlo, en furgón o furgoneta, remolque o grúa profesional. Cada opción tiene sus ventajas, pero también requisitos técnicos y legales que conviene conocer antes de decidir.
En esta guía te explicamos qué necesitas para cada caso, cómo asegurar tu moto correctamente y en qué situaciones es mejor contar con un servicio especializado para garantizar un traslado seguro y sin riesgos.
Antes de mover la moto
Antes de cargar la moto o intentar moverla, conviene hacer una revisión rápida. Son solo unos minutos que pueden evitarte un susto o una visita al taller.
Empieza comprobando que los frenos, la dirección y los neumáticos estén en buen estado. Si la moto lleva tiempo parada, revisa también el nivel de aceite y que no haya fugas visibles. Y si vas a arrancarla para subirla a una rampa, asegúrate de que la batería tenga carga suficiente.
Evita manipular o transportar la moto con el motor caliente o el depósito lleno, sobre todo si lo haces dentro de un garaje o furgón cerrado. El calor y los vapores pueden generar situaciones peligrosas durante la carga.
También es fundamental preparar el material de sujeción antes de empezar. Ten a mano una rampa estable, cinchas o eslingas de buena calidad y anclajes homologados. Estos elementos son los que realmente garantizan que la moto quede firme durante el trayecto y no se mueva con los baches o frenadas.
Dedica un momento a dejar todo listo y hacerlo en un lugar adecuado. Una buena planificación es la mitad del trabajo y la diferencia entre un traslado tranquilo y uno accidentado.

Transportar una moto en furgón o furgoneta
Usar un furgón o una furgoneta es una de las formas más habituales de transportar una moto. Es una opción cómoda, segura y muy práctica, siempre que se realice correctamente y con el equipo adecuado.
Ventajas principales
El furgón protege la moto del viento, la lluvia y la suciedad del camino. Además, al viajar en un espacio cerrado, reduce el riesgo de golpes o caídas durante el trayecto. Si cuentas con los anclajes adecuados, es una alternativa eficaz para desplazamientos cortos o incluso traslados entre islas.
Importante: no sirve cualquier furgón
Para transportar una moto de forma legal, el vehículo debe estar autorizado para carga y contar con anclajes o puntos de sujeción homologados. Si se usa un vehículo particular o de pasajeros sin esa adaptación, la Policía puede considerar que el transporte no cumple con las normas de seguridad y aplicar una sanción.
Además, en caso de accidente, el seguro podría no cubrir los daños, tanto del vehículo como de la moto transportada.
Cómo cargarla paso a paso
- Utiliza una rampa firme y estable para subir la moto, nunca improvises con tablas o superficies inseguras.
- Lo ideal es hacerlo con ayuda de otra persona, para mantener el equilibrio mientras empujas y controlas el peso.
- Una vez dentro, coloca la moto recta, sin usar el caballete lateral, y asegúrala con cuatro cinchas: dos delante (desde la horquilla o el manillar) y dos detrás.
- Ajusta las cinchas con firmeza, pero sin forzar la suspensión. La moto no debe moverse, pero tampoco quedar excesivamente comprimida.
Precauciones y normativa básica
Evita transportarla tumbada o con el caballete lateral apoyado, ya que puede perder líquidos o dañar la suspensión.
Usa siempre cinchas homologadas, revisa que la carga esté bien equilibrada y asegúrate de que el furgón no supere su peso máximo autorizado.
Y, por último, asegúrate de que la puerta trasera quede bien cerrada y bloqueada. Cualquier movimiento dentro del vehículo puede ser peligroso durante el trayecto.

Transportar una moto en remolque
El remolque es otra forma habitual de mover una moto, sobre todo cuando no cabe en un furgón o se necesitan transportar varias a la vez. Sin embargo, no basta con engancharlo y salir a la carretera, existen requisitos legales y de seguridad que conviene conocer antes de utilizarlo.
Tipos de remolques para motos
Hay remolques individuales, dobles o multiplaza, diseñados específicamente para el transporte de motos. Los más comunes son los de carril con soporte delantero, que sujetan la rueda delantera y facilitan la estabilidad durante la marcha. En trayectos largos o con varias motos, es recomendable optar por modelos con anclajes independientes y sistema de amortiguación.
Requisitos legales básicos
Para circular con un remolque, el vehículo debe tener bola de enganche homologada, matrícula roja propia, ITV en vigor, luces operativas y, en algunos casos, seguro adicional.
Además, la velocidad máxima permitida es menor:
- 90 km/h en autovías y autopistas.
- 80 km/h en carreteras convencionales.
Superar estos límites puede suponer multas o pérdida de puntos, así que conviene planificar el trayecto con tiempo.
Cómo asegurar correctamente la moto
Distribuye el peso de forma equilibrada sobre el eje del remolque. Usa al menos cuatro cinchas homologadas, cruzadas y bien tensadas, para evitar movimientos laterales. Comprueba que las ruedas estén centradas en el carril y que la moto no toque los laterales.
Errores comunes y riesgos
Circular con un remolque mal anclado, sin señalización o con exceso de peso puede provocar daños en la moto o accidentes graves. También puede acabar en multas importantes si no se cumplen los requisitos técnicos.
Por eso, si no dispones de un remolque o prefieres evitar complicaciones, la mejor alternativa es recurrir a una grúa especializada en motos, que cuenta con el equipo adecuado y personal cualificado para este tipo de traslados.
Cuándo elegir una grúa para motos
Aunque existen otras formas de transportar una moto, hay situaciones en las que la grúa es la opción más segura y práctica. No solo por comodidad, sino porque garantiza que el traslado se realice sin riesgos ni daños para el vehículo.
- Averías o accidentes
Si la moto no arranca, tiene una rueda bloqueada o ha sufrido un accidente, lo más recomendable es llamar a una grúa para motos. Estas grúas están preparadas para cargar el vehículo sin necesidad de arrancarlo y cuentan con rampas, cabrestantes y anclajes específicos que evitan daños durante la maniobra. - Trayectos largos o fuera de la isla
En desplazamientos largos, el transporte profesional reduce el desgaste del vehículo y evita problemas de seguridad. En Tenerife, por ejemplo, los traslados interurbanos o entre puertos pueden requerir planificación y medios que solo una empresa de grúas puede ofrecer con garantías. - Falta de medios o espacio
Muchos conductores no disponen de remolque o furgón adecuado para hacer el traslado por cuenta propia. En esos casos, la grúa es la opción más sencilla y segura. Además, los conductores profesionales conocen los puntos de carga de cada modelo de moto y los procedimientos adecuados. - Seguridad y ahorro de tiempo
Intentar cargar una moto sin los medios adecuados puede acabar en caída, daños o lesiones. Con una grúa, el traslado se hace en minutos y sin riesgos. Además, las aseguradoras suelen cubrir este tipo de asistencia, por lo que el servicio puede ser gratuito según la póliza.
Si tienes dudas o el traslado implica cierta dificultad, lo mejor es confiar en un servicio de grúa profesional. En Grúas Cuchi contamos con grúas en Tenerife adaptadas para motos y personal especializado que garantiza una asistencia rápida y segura en cualquier punto de la isla.
Consejos para un traslado sin imprevistos
Transportar una moto parece sencillo, pero pequeños descuidos pueden acabar en una multa o avería. Para evitarlo, conviene tener en cuenta algunos consejos prácticos antes de empezar el traslado.
Evita improvisar
No uses rampas inestables, cuerdas viejas o puntos de sujeción dudosos. Una moto mal amarrada puede volcar en una curva o desplazarse con la vibración del camino. Invierte en cinchas homologadas y rampas firmes, evitarás sustos y daños en tu moto.
Comprueba el equilibrio antes de salir
Una vez asegurada, empuja ligeramente la moto para confirmar que no se mueve. Si notas holgura en alguna cincha, reajusta. Revisar dos veces es mejor que frenar de golpe y descubrirlo tarde.
Planifica el trayecto
Evita las horas de mayor tráfico y revisa la ruta si circulas con remolque. Recuerda que con carga debes reducir la velocidad y aumentar la distancia de seguridad.
No fuerces el vehículo de transporte
Tanto en furgón como en coche con remolque, es importante no superar los límites de peso y mantener la carga estable. Un exceso puede afectar la dirección, la frenada y el consumo.
Y si el traslado te resulta complicado, no te arriesgues.
En Grúas Cuchi contamos con grúas adaptadas para motos, personal especializado y más de 40 años de experiencia realizando traslados en Tenerife de forma rápida y segura. Así evitas imprevistos y te aseguras de que tu moto llegue en perfectas condiciones.
